La infección urinaria, es técnicamente la sintomatología de cistitis o inflamación de la vejiga, asociada a un cultivo de orina que demuestre la presencia de una bacteria en la orina.

¿Por qué inicio con esta definición? Porque las mujeres (principalmente) podemos tener “síntomas de cistitis” y no tener infección en la orina.

Usualmente, las pacientes vienen referidas a la consulta con historias de miles de cuadros de infección urinaria, pero cuando le preguntamos si alguna vez se han hecho un cultivo, la respuesta muchas veces es negativa.

¿Cuáles son los síntomas de cistitis?

• Ardor al orinar.
• Orinadera.
• Orinar gotitas aun teniendo muchas ganas de orinar.
• Orinar y quedar con ganas.
• Dolor en la parte baja del abdomen.
• Molestias o un “jalón” al terminar de orinar e incluso dolor en la espalda cuando se está complicando el cuadro.

Una mujer puede tener cistitis sin tener una bacteria presente en el cultivo, porque hay situaciones donde el área de la vejiga y la uretra se inflaman y causan estos síntomas.

Hay escenarios donde hay una verdadera infección urinaria y se tiene que tomar antibióticos para que la persona mejore, y hay situaciones donde solo con mucha agua y medicamentos que mejoren la sensibilidad de la vejiga los síntomas mejoran.

Una infección urinaria puede ocurrir tanto en hombres como en mujeres, y a cualquier edad, pero es más común en mujeres. Siempre que haya los síntomas arriba descritos, hay que buscar ayuda de un médico, ya que lo mas simple se puede complicar e incluso se puede orinar sangre o requerir hospitalización para medicamentos intravenosos o realización de procedimientos.

¿Por qué la infección urinaria es mas común en la mujer?

Lo que ocurre es que la mujer tiene una anatomía un poco desfavorable para la infección urinaria.

La uretra (el tubo por donde sale la orina) está en íntimo contacto con la vagina en las mujeres, y además es mucho más corta que la del hombre.  Tiene entre 3-4 cm de largo y ya llega a la vejiga. La uretra del hombre en cambio mide 17 cm en promedio y para que una bacteria llegue a la vejiga es más difícil.

Por esta razón, el intimo contacto con la vagina, es muy común que las mujeres tengan cistitis días después de haber tenido relaciones sexuales.  La inflamación en el área puede irritar la uretra, las secreciones vaginales combinadas con el semen y el sudor pueden causar infecciones, y como la uretra es tan corta las bacterias suben rápidamente a la vejiga. Para evitar la cistitis e infección urinaria es recomendable orinar e incluso lavarse el área vaginal luego de tener relaciones sexuales.

En las mujeres postmenopáusicas la situación es mas desfavorable aún. La falta de estrógeno causa resequedad vaginal y en algunos casos parte de la vejiga esta hipersensible. Estas cosas pueden aumentar el riesgo de tener una infección urinaria.

Otras recomendaciones para no tener una infección urinaria son:

• No usar duchas vaginales.
• Evite aguantar las ganas de orinar hasta “que se este reventando” (aunque haya que terminar ese informe o esté dando clases).
• No tener la ropa interior húmeda por tanto tiempo luego de hacer ejercicio.
• Evitar el uso de ropa muy ajustada (me quiero meter en el mismo jean que usaba en la escuela o en la universidad) o hilos dentales (a veces hasta por una faja hay síntomas de infección urinaria), entre otros.

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